El Defensor del Profesor alerta de la inacción de la Administración aragonesa ante los problemas del personal docente.
- En el curso 2023-24, el servicio prestado por ANPE incrementó en Aragón en un 17,9% las actuaciones de apoyo al profesorado víctima de situaciones de conflictividad en los centros.
- El porcentaje de docentes atendidos que sufrieron ansiedad es del 39,4% y al 15,2% se le concedió la baja
- El sindicato vincula la incidencia de problemas asociados a la salud mental con la sobrecarga burocrática y la falta de recursos para afrontar los retos educativos
El último informe del Defensor del Profesor, servicio prestado por ANPE Sindicato Independiente para apoyar al profesorado víctima de situaciones de conflictividad, refleja en nuestra comunidad un aumento del 17,9% en el número de actuaciones llevadas a cabo en el curso 2023-2024 respecto al año anterior. La mayor parte de las actuaciones se concentra en Educación Secundaria (51,5%), seguido, en alarmante ascenso, por los conflictos en Educación Primaria (27,3%) y Formación Profesional (15,2%).
La coordinadora del Defensor del Profesor de ANPE, Teresa Hernández, señala que estas cifras tratadas por el equipo aragonés del Defensor del Profesor constituyen exclusivamente “la punta del iceberg”, pues muestran sólo una pequeña parte de los problemas de convivencia en los centros educativos. A pesar de ello, subraya que el informe pone de manifiesto “las dificultades que enfrentan los docentes en su día a día, ante la falta de acción de la Administración para encararlas y poner medios que permitan superarlas”.
El informe evidencia una complejidad cada vez mayor de los casos de conflictividad abordados en las aulas aragonesas, así como el impacto que éstos tienen en la salud mental del profesorado. En nuestra comunidad, siguen en niveles elevados los docentes que, acudiendo a nuestro servicio, presentan cuadros de ansiedad (39,4%) y aquéllos que se encuentran de baja (15,2%).
La alta incidencia de problemas asociados a la salud mental en el colectivo docente está muy vinculada a la creciente sobrecarga burocrática y a la falta de recursos aportados por la Administración para afrontar los retos educativos. En este sentido, factores como los constantes cambios normativos, la infradotación de las plantillas docentes y de personal de administración y servicios, y las plataformas digitales poco intuitivas y propensas a sufrir dificultades de conexión, así como la puesta en marcha de un número cada vez mayor de coordinaciones y proyectos sin consignación presupuestaria ni de personal, multiplican las tareas que debe realizar el personal docente y le provocan estrés y desmotivación.
En el curso 2023-2024 fue complicado en las aulas aragonesas. Se incrementaron en términos relativos los problemas con alumnos (del 39,3% al 63,6%), aunque disminuyeron algo los relacionados con la administración (del 46,4% al 39,4%) y las familias (del 35,7% al 24,2%), siendo todavía altos los niveles de ambos. El crecimiento más significativo son los casos relacionados con alumnado, que representan el 63,6% del total.
Son los docentes de educación Secundaria y FP los que más problemas tienen con los alumnos (76,5% y 60% respectivamente) mientras que, por su lado, los Maestros de Ed. Infantil y Primaria reportan más problemas con las familias (44,4%).
Los principales problemas que reportan los docentes en el curso 2023-24 son: en primer lugar, los problemas y dificultades con la administración (36,4% de los casos atendidos en el servicio); en segundo lugar, las falsas acusaciones (30,3%) se sitúan como el segundo problema que más reportaron los profesores en el curso 2023-24. En tercer lugar aumentan alarmantemente las agresiones de alumnos a docentes (24,2%), seguido, de cerca, por las denuncias en el centro o inspección con un 18,2% de los casos. Este último es un porcentaje similar a las quejas e intervenciones del servicio por problemas de docentes para poder dar clase y desarrollar la actividad en el aula.
Los conflictos relacionados con el alumnado aumentan, por tanto, respecto al curso 2022-23 y ANPE manifiesta su preocupación ante el aumento de las agresiones de alumnos a docentes (24,2%), así como el porcentaje de falsas acusaciones que sigue aumentando (15,2%)
Se reducen los problemas de convivencia relacionados con los padres, que se concentran principalmente en las etapas de Infantil y Primaria. Los más repetidos son las denuncias en el centro o ante la Inspección educativa (18,2%) y el acoso (9,1%).
En cuanto a la actuación llevada a cabo por el servicio del Defensor del Profesor, en el 57,6% de los casos se proporcionó asesoramiento a los profesores; otro 57,6% apoyo; en un 17,7%, asesoría jurídica que incrementó respecto al curso pasado, y en un 6,1% información sobre legislación.
Reivindicaciones de ANPE
El sindicato hace un llamamiento a la Administración para que asuma su responsabilidad en el apoyo a los docentes. La coordinadora del Defensor del Profesor advierte de que “la figura del coordinador de bienestar, fundamental para el bienestar emocional y la convivencia en los centros, sigue sin contar con los recursos y la formación necesarios”. Además, subraya que, “aunque existen marcos normativos que favorecen la convivencia escolar, estos no son suficientes sin un verdadero compromiso de los equipos directivos y de la Administración”, e insiste en la importancia de que se impliquen todos los actores de la comunidad educativa. Hernández resalta que “los docentes deben contar con un respaldo adecuado frente a agresiones o falsas denuncias” y que “los protocolos deben ir acompañados de una memoria presupuestaria que asegure su correcta implementación”.
ANPE advierte de que el sistema educativo español necesita “reformas profundas” para mejorar la consideración social del profesorado y garantizar el progreso de la sociedad. En este sentido, demanda “acuerdos estables que garanticen la perdurabilidad de la normativa y estimulen a los profesionales reconociendo sus méritos”. Es imprescindible legislar un Estatuto Docente que contemple los derechos y deberes del profesorado, su valoración y su dignificación ante la sociedad, y en el que se articulen medidas que devuelvan la autoridad al docente y se establezcan las bases de una verdadera carrera profesional que haga la docencia más atractiva y motivadora. Además, recuerda la necesidad de que se reconozcan las enfermedades profesionales de los docentes.
Del mismo modo, es necesaria una mayor inversión en educación, que permita abordar necesidades como la reducción de las ratios alumnado-docente, el refuerzo de las plantillas docentes y una dotación suficiente de personal de administración y servicios en los centros. Igualmente, reclamamos desde ANPE en Aragón la simplificación de la documentación que debe cumplimentar el personal docente, la creación de entornos virtuales accesibles para el profesorado y un aumento de las horas de coordinación y acción tutorial con el fin de posibilitar que las tareas burocráticas se realicen dentro del horario de trabajo.
Con su apuesta por el servicio del Defensor del Profesor, ANPE muestra su compromiso con el apoyo a los docentes que en Aragón pasan por situaciones de acoso e intimidación, así como su empeño en mejorar la consideración social del profesorado y en situar a la educación y a sus profesionales en el centro de las prioridades del país.
